martes, 27 de mayo de 2014

John Whitmore Padre del Coaching

Es importante dedicar unas palabras al padre del coaching, conocer las corrientes y los fundamentos que desarrollo John whitmore. Aprender el arte de la buena gestión,  comprender su importancia para liberar el potencial de las personas y aumentar al máximo su rendimiento. El coaching “no es una técnica que deba aplicarse de una manera rígida en determinadas circunstancias, sino una manera de dirigir; de tratar a las personas, una manera de pensar y de ser”.

Whitmore explora un nuevo ámbito psicológico sobre la búsqueda del sentido y de los objetivos personales en el trabajo, la cultura y los valores empresariales. Para muchas empresas multinacionales, les ha ayudado a mejorar su rendimiento y rentabilidad, ya que propone tareas como, por ejemplo, plantear preguntas efectivas en lugar de instrucciones u órdenes para elevar la conciencia y la responsabilidad de los empleados; seguir una determinada secuencia de objetivos para generar acciones inmediatas y lograr un rendimiento extraordinario o bien relacionar las iniciativas y las metas de todos los individuos de la organización.

John Whitmore comienza uno de sus  libros declarando que no existen soluciones rápidas: “El buen coaching es una habilidad, un arte quizá, que requiere una profunda comprensión y una dilatada práctica si se pretende extraer todo su asombroso potencial”

Esta premisa supone aceptar que, en efecto, todos tenemos un potencial que puede ser liberado. Por eso, Whitmore cree que un coach debe ser capaz de ver a las personas no como son, sino como pueden llegar a ser y utiliza, en su trabajo, las siguientes premisas:

1. Elevar la conciencia, la capacidad de darse cuenta, esto permitirá al cliente una mayor comprensión de sí mismo y la posibilidad de identificar el lugar a donde realmente quiere llegar. La conciencia se desarrolla a través del autoconocimiento y alimenta la confianza, la seguridad y la responsabilidad. Normalmente nuestro nivel de conciencia es muy bajo, es imprescindible para salir adelante en el día a día. El coach ayuda a sus clientes a tomar conciencia del potencial que puede llegar a desarrollar por sí mismos.

2. Asumir la responsabilidad, La responsabilidad implica reconocer que somos dueños de nuestras acciones. Hacernos responsables es la única opción de darnos el poder de intervenir en nuestra vida. Más allá del juicio de culpable o inocente, cuando nos hacemos responsables, podemos preguntarnos qué hacer, cómo intervenir. Solo así encontramos la posibilidad de actuar.

3. Desarrollar la confianza en uno mismo, para saber que podemos conseguir aquello que deseamos, para reconocernos como un ser único y valioso. La persona que cree en sí misma, tiene confianza en lo que hace y en lo que es. El que cree en sí mismo, también creerá en los demás, en el futuro, en la sociedad que le rodea, tendrá una actitud más abierta al cambio y a la posibilidad.




domingo, 11 de mayo de 2014

7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva

Hoy me gustaría hablar de uno de los libros más leído en los últimos años en todo el mundo, por su tema y lo que aporta a las personas que desean romper paradigmas y llegar a ser más exitosas a nivel personal como empresarial, los 7 hábitos de la gente altamente efectiva es un referente para la consecución de metas y hábitos.

Ante todo me gustaría exponer varios conceptos, que nos ayudara a entender aún más el significado de este libro, el primero es que todas las personas vemos al mundo no como es, sino como somos. Lo que somos, nuestro carácter y nuestros valores, esto comunica mucho más que lo que decimos o hacemos. No es lo que nos pasa lo que afecta nuestra manera de conducirnos, es nuestra interpretación de lo que nos sucede lo que la condiciona.

Los Paradigmas es la forma como vemos al mundo, de cómo lo interpretamos, y entendemos nuestro rol. Nuestras actitudes y nuestra conducta son el resultante de nuestros paradigmas, si aprendemos a romper los paradigmas, tendremos un mejor nivel de pensamiento y estaremos en la ruta a un mejoramiento significativo, y un hábito es un principio que se internaliza, es el solapamiento y la integración de tres elementos: Conocimiento, Experticia/Pericia, y Actitud.

Para cambiar los paradigmas que tenemos anclados en nuestra manera de ser, crear hábitos y lograr metas,  hay que tomar acciones diferentes y para ello se debe modificar el comportamiento basado en los 7 hábitos: Ser Proactivo, Comience con un fin en mente, poner primero lo primero, piense en ganar/ganar, busque primero entender, luego ser entendido, sinergia, renovación y mantenimiento personal.

El primer hábito se refiere a ser proactivo, la conducta proactiva es el producto de nuestras propias decisiones, basadas en valores. La conducta Reactiva nos lleva a culpar a otros, o las circunstancias de nuestros propios males.

El segundo hábito se refiere a empezar con un fin en mente, consiste en empezar hoy con una  imagen, el cuadro o el paradigma de vida como marco referencia para el examen de todas las cosas.

El tercer hábito nos habla de cómo determinamos y administramos nuestro tiempo.

El cuarto hábito expone el Ganar / Ganar es balancear coraje y consideración, es el equilibrio entre el respeto por nosotros y el respeto por los demás, es la esencia de la interacción humana.

El quinto hábito nos indica que hay comprenderse uno mismos ver cuáles son las fallas que tenemos, corregirlas para poder entender y comprender a las demás personas.

El sexto hábito nos indica la sinergia, es importante ya que en un principio es la realización suprema de todos los hábitos anteriores. Es la efectividad, es el desarrollo de la unidad y la creatividad con otros seres humanos.

El séptimo hábito consiste en preservar y realizar el mayor bien que usted posee: usted mismo significa renovar las cuatros dimensiones de su naturaleza, la física, la espiritualidad, la mental y de social / emocional.